Ya que aun estamos en el mes de mayo, mes de la madre. Y siempre es el momento, para platicar de este tema tan lleno de amor y un poco caótico.
Tal vez desconozco como haya sido anteriormente el ser mamá y más cuando las familias eran muy grandes, pero de lo que si puedo platicar es sobre mi experiencia, de trabajar y ser mamá, lograr una empatía con mi maternidad y ese equilibrio que se necesita para poder llevar diferentes tareas al mismo tiempo.
Con mi primer hijo deje mi lado profesional para enfocarme en él. Aprendí mucho llevarlo a él de la mano y poder dedicarle el tiempo, sus primero años de vida ha sido de las mejores cosas que he tenido. Sin embargo sabía que había algo dentro de mi que quería salir. El estudiar, tener una carrera y ser creativa era esa chispa que estaba dentro de mi. No sabía si estaba preparada para poder llevarlo, que tal vez no supe cómo hacerlo al principio, pero creo que no estuvo tan mal. Llevar un emprendimiento donde me involucraba mucho, fue lo que me dejó de experiencia para poder pensar y replantearme exactamente qué era lo que quería para mi vida.
Estoy segura que logré conseguir descartar esa falsa idea de no poder llevar de la mano un proyecto y ser mamá.
Y fue aquí donde arranqué mucho más fuerte, sabiendo realmente lo que quería, y hacia dónde me dirigía. Con mi segunda bebé, comencé Chéel y Nina crecieron juntas; y fue tanto que justo deje de crear bolsas (porque yo las cocía el primer año de Chéel) un mes antes de que naciera. Y regresé a trabajar un mes después.
Fue muy cansado, y en ocasiones dejar el trabajo por atender a una bebé en casa y a un niño inquieto que también brincaba de un lado a otro.
Ya teniendo a dos pequeños en casa, inquietos, donde el hermano deseaba que su hermanita creciera rápido para jugar con ella. Y con muchas oportunidades que llegaban a mi, era: dejarlas pasar ó aprovechar el momento.
Decidí aprovecharlo y fue ahí donde aprendí mucho más a crear ese lazo entre mi trabajo y mi maternidad. Que aunque hay momentos un tanto complicados para sacar el día, hay momentos de muchas aventuras que logran llegar con mucha emoción. En su mayoría, puedo decir que son más los días en que puedo compartir los momentos con ellos y que se involucran en lo qué mamá hace y el tiempo que resta es para generar el contenido y esas ideas para Chéel.
El otro día recibí un mensaje para una entrevista en Excelsior y fue increíble poder compartir mi experiencia con las Herramientas de Meta, en esta caso WhatsApp y como me ha ayudado a crecer en mi empresa y crear conexiones con amigas.
Te dejo la nota!!
Se que vamos por buen camino, sé que estamos haciendo las cosas bien, aunque nada esta escrito, por el momento, el ser madre de dos pequeños, es lo mejor de la vida. Y sigo pensando en: Si aun esta en tu mente, vale la pena correr el riesgo. Y si tu aún lo piensas, no dejes pasarlo, sé que vienen cosas bonitas después de arrancar aquello que te apasione hacer.